martes, 20 de abril de 2010

Tim Burton en el País de las Maravillas


La imaginación y capacidad de dirección de Tim Burton se presentan en esta película, como siempre lo han hecho en todas sus producciones anteriores, muy sui generis, muy burtonianas en cuanto a la estética, aunque en esta producción puede que algun espectador haya podido quedarse con la miel entre los labios, quedarse insatisfechos a la hora de entregarse a lo que el director evoca...

Desde el inicio se atisba el profundo respeto que este proyecto infunde a Burton, quien procura cuidar cada secuencia, cada plano y cada detalle a fin de conservar la esencia original de los cuentos que exaltan el talento mágico de Lewis Carrol: Alicia en el País de las Maravillas ,y Alicia a través del espejo . Sendos libros juegan con las apariencias, las retuercen para contemplar con lucidez lógica (e incluso matemática) los disparatados puntos de vista que de ese retorcimiento surgen. Soslayan la realidad y la fantasía con un vuelo de ingenio e imaginación solo alcanzable por las plumas de los grandes escritores.
Este aspecto, como pude aludir antes, está sumamente cuidado por Tim Burton, que trae a la pantalla ese mundo maravilloso y enigmático lleno de falsas apariencias que nos fascinan cuando las descubrimos, mientras que a la vez conserva ese misterio, ese juego de apariencia inocente que lo hace tan delicado, lo que es un grandísimo acierto por parte de este singular director, con el que es imposible quedarse indiferentes.

Si por algo se caracterizan estos cuentos (y la película) es por el público a quienes van dirigidos. Un error muy común consiste en creer que se trata de cuentos dirigidos a un público infantil, que por supuesto lo son, pero el contenido que hay en ellos es en muchas ocasiones un contenido adulto que, gracias la maestría con la que emplea el lenguaje Carroll, se ocultan bajo la apariencia infantil de la inocencia o sencillez; por lo tanto, es igualmente enriquecedor y apto tanto para niños, como para jóvenes y adultos. En este sentido la película de Tim Burton logra emular estos cuentos y promete un espectáculo (tanto si es en 3D como si no) para niños, padres, madres, abuelos y demás familia que acompañe; como también lo promete para cualquier otro individuo y es que como decía respecto a los cuentos, la capacidad de interpretación y de disfrute ante un acontecimiento como este no tiene edades.
Además, a este ambiente estético tan bien cuidado hay que sumarle el enorme acompañamiento musical que acostumbran la mayoría de las películas de Burton gracias a la inapreciable colaboración de Danny Elfman, un viejo conocido y gran amigo del director que para esta película tan "familiar" no podía faltar. (Altamente recomendable la banda sonora original, aquí os dejo un enlace con el que os puedo guiar para que no os confundáis con el otro album titulado Almost Alice que no es la banda sonora original)

El elenco de actores configurado por británicos y estadounidenses sazonan con buen gusto esta especial cita para la que han colaborado personalidades como el "hijo pródigo" de Johnny Deep (Sombrero Loco), que siempre acude cuando el director le llama; Mia Wasikowska (Alicia), Helena Bonham Carte (Reina de Corazones), Alan Rickman (Absolem), Anne Hathaway (Reina Blanca) y Christopher Lee, entre otros.
Hay que destacar que el dúo Burton-Deep se junta de nuevo y bien es cierto que funciona y gusta, pero puede que algunos de sus más allegados seguidores (como este humilde servidor) no encuentren, en esta ocasión, ni al mejor Burton ni al mejor Deep. El primero parece haberse escondido detrás de la pantalla expectante, como si no tuviera nada más que decir que no estuviera ya dicho o reflejado en ella. Sabemos que está ahí porque su sello es palpable pero no le vemos salvo en determinados momentos, en sutilezas del guión a modo de guiños, fugazmente... Mientras que el segundo, a pesar de sorprendernos una vez más con su polivalencia interpretativa, no parece haber dotado al personaje de ese "ángel" abrumador con el que realzaba siempre la personalidad de sus interpretaciones, es un Deep agridulce.

Finalmente, puedo decir que me encuentro ante una muy buena película que embriaga con cada imagen emitida, que te cautiva y envuelve en esa sala oscura últimamente tan controvertida a raíz del asunto 3D que viene arrollando todo lo que pilla a su paso, aunque ese no es el tema a tratar. No obstante, en el transcurso de ese espectáculo tan mágico y cuidado se puede presenciar el atropello de algunos planos argumentales que, más allá de imprimir un ritmo vertiginoso a las imágenes y a la trama, no comunican ni transmiten nada, por lo que el espectador se atraganta con ese frenético atropello de vacío. Únicamente al principio y al final se muestra el verdadero Burton al que estamos acostumbrados, provocando que nos preguntemos al salir del cine por qué demonios no se había mostrado completamente, es decir, nos preguntamos si ha dado efectivamente todo lo que podía dar de sí, o sin embargo, si ha podido dejarse algunas cosas en el tintero...si ha podido, en última instancia, perderse en ese País de las Maravillas y no ha conseguido transmitir todo su esplendor más que a destellos, tan efímeros, como brillantes...
Sea como fuere, mi nota es un notable 8.

domingo, 11 de abril de 2010

Travesía hacia el refugio


Las emociones me exacerban sin control, yo voy a la deriva, voy sin rumbo hacia lo que me depare este estado aventurero en el que me aguardan peligros, pero más que nada, misterios…Ya lo oigo…es un rumor, como una leve brisa lleva consigo los susurros de un río lejano que fluye en lo profundo del bosque...en lo profundo del alma.
En el vaivén de emociones en el que estoy inmerso por completo la realidad se diluye, se detiene en una búsqueda interior, el exterior es laxo y rutinario, lo interesante transcurre dentro…No quieres salir de allí, pues lo que aparentemente estaba muerto parece tener más vida de lo que creías, o en otras palabras, la ficción cobra vida ante una realidad que está muerta, realidad parca en emociones y misterios, puesto que no parece haber nada nuevo, original o interesante que no esté descubierto ya. Era un hermetismo espiritual, un asceta interior, una crisálida humana…
En este momento, nos convertimos en una carcasa acorazada que, protegida del hastío del mundo, algún día romperemos cuando encontremos las respuestas y estemos dispuestos a descubrir las incertidumbres que se encuentran en el exterior pero que estaban ocultas, esperando ser encontradas por unos ojos más atentos; y cuando lo hagamos, estaremos preparados para afrontar la dura realidad que tratará de asesinarnos, de atentar contra nuestra identidad y de adoctrinarnos en la negatividad, conformismo y desaire reinantes a la primera de cambio.
Es triste pero no menos cierto que todo lo que toca el ser humano se pervierte, el lenguaje está cargado de ideología, pero el lenguaje por desgracia no es algo que esté grabado a fuego, no es algo permanente, cambia. Al contrario de lo que mucha gente piensa, el lenguaje es una herramienta siempre candente y que se puede moldear, en este caso pervertir, reutilizar con otros fines…así un texto (escrito u oral) que suponga la salvación de la humanidad podrá, tras una lectura perversa, ser interpretado para destruirla y viceversa...
¿Estamos al fin y al cabo condenados? No lo sé, sólo espero que tanto si lo estamos como si no, este bello planeta no sufra las consecuencias ni se vea arrastrado por nuestra estupidez y negligencia. Ver como perece lentamente éste pequeño reducto de vida me agarrota el alma, y me sacrificaría con gusto para restaurarlo, plantaría mi espíritu y dejaría que echara raíces para abrazar la tierra con fuerza, dejar que el viento eleve mi pensamiento y purificarme con el rocío de la lluvia… y de esta forma sentirme plenamente vivo, en perfecta armonía… ya que como humano entre millones de humanos no tengo nada que hacer para cambiar el curso de las cosas a nivel mundial, tan sólo no quiero morir como humano(no querría cargar con ese lastre o con todos los actos que se han cometido en su nombre: guerras, asesinatos, muertes…) sino como ser vivo, y hablo de ser, en el sentido de ‘’formar parte’’,pasar a formar parte de la vida, la naturaleza, nuestra madre, nuestro hogar, nuestro refugio...al que me dirijo en estos instantes.

sábado, 3 de abril de 2010

Una pérdida de tiempo

Como sabréis llevo algún tiempo dedicándome a este noble arte de escribir pero nunca me he parado a reflexionar sobre lo que ello implica y en estos momentos, me fascina no haberme dado cuenta de la gran historia que se ocultaba en esta encomiable labor. El problema que siempre me surge al tomar las riendas de mis ocurrencias o sentimientos y darles forma sobre el papel es siempre el mismo, y no termino de sácamelo de la cabeza por más que lo intente. Esto como se verá a continuación provoca un conflicto de emociones en mi interior, por un lado me frustra y por otro me anima y alienta.
Y es que hay tanto que contar, y tan pocas palabras para hacerlo...por este motivo quizá ocurra que cuando descubrimos una nueva palabra, sintamos que se ha abierto ante nosotros un universo amplio y maravilloso en el que poder retozar mansamente, reflexionar con mayor tranquilidad, Sentir de otra forma y satisfacer nuestra impotencia expresiva.
En este sentido las palabras nos ayudan a conocer mejor nuestros sentimientos, nuestras frustraciones, manifestar con mayor exactitud nuestro pensamiento, que se expande hacia nuevos terrenos inexplorados, ocultos, secretos…cierta película creo recordar hablaba sobre este aspecto, sobre la vida secreta de las palabras.
Nunca he escrito sobre mi manera de escribir, y no lo voy a hacer ahora, cuestionarla sería demasiado sencillo y más aun criticarla. Sin embargo, no pretendo ahora ni he pretendido nunca ser objeto de admiración o alabanza aunque viene bien explicar en qué consiste este pasatiempo. Únicamente escucho una sinfonía, me sumerjo en ella y no salgo hasta que me sienta tan extasiado o abrumado por la oleada de sensaciones que hasta pueda incluso perder la noción del tiempo y espacio si no salgo. Esa música cuenta varias historias, no para de contarlas, se emociona, y cuando termina sientes que te ha contado un sinfín de vivencias y te parece haber escuchado al ser más anciano y sabio de la Tierra. Te preguntas por qué solo tú le prestas atención y te comprometes solidariamente a transcribir sus palabras en un folio, como haría un avezado aprendiz que profesa una profunda admiración por su difunto maestro e intentase entender la complejidad que éste le intentó expresar en su día.
Por tanto, las palabras no salen de mí, no os confundáis, soy simplemente un intérprete anodino, un cuenta cuentos humilde que escucha lo que dice el llanto de la lluvia, la risa del sol o el susurro del viento…sus maestros. Puede que en este sentido sea muy voluble, espontáneo, dependiente. A pesar de eso, disfruto, y retozo cual equino en la pradera henchido de espíritu, pues ¿no es entrañable escuchar de vez en cuando los sonidos que normalmente ignoramos, los sonidos de nuestra mente y corazón, sonidos que no podemos atender ya que disponemos de poco tiempo para cuidarlos, poco tiempo que perder? No nos damos cuenta de que los que realmente salimos perdiendo somos nosotros, y cuando queramos escucharlos, puede que sea demasiado tarde, pues ellos pueden considerarnos a nosotros, una pérdida de tiempo…

viernes, 2 de abril de 2010

En este refugio...

Desde este sitio pretendo escribir todo aquello que escribí en su día pero nunca compartí, pensamientos, crítica, sentimientos... Con ello elaboraré un refugio donde poder guardar esas cosas que tanto apreciamos y sin embargo también descuidamos, ya que la cantidad de tiempo que dedicamos a nosotros mismos, a pararse a pensar en lo que hacemos, a compreder...es insignificante.
Este refugio acogera gustosamente pues, a todos aquellos que quieran desconectar un poco de la asfixiante rutina diaria para conectar con ese espacio en el que nos refugiamos cuando estamos solos, nuestro hogar interno, nuestra identidad...
Bien, el refugio queda oficialmente abierto y como he dicho espero que os sirva tan bien como a mí y... Ah si! no olvidéis cerrar la puerta al salir! saludos.